lunes, 13 de julio de 2015

4 AÑOS

Se dice pronto, cuatro años ya. Tantos amigos, personas, lugares, trabajos, y sobretodo emociones. La gran mayoría buenas, pero también malas. Y aun así no me he arrepentido en todos estos cuatro años ni una sola vez de haberme ido a Sevilla a estudiar. Primero el Grado superior de Edificación y este año la carrera de Arquitectura. Una sola decisión. Y todo lo que ha desencadenado.
He conocido monumentos, fiestas, tradiciones, platos típicos, he adquirido nuevos conocimientos y aptitudes, he tenido que desempeñar diferentes funciones en estos 4 años y aprender a sobrevivir sin ‘mama’. He hecho cosas que antes ni imaginaba como se hacían. He salido, vivido, gritado y he hecho todo cuanto he querido y podido. Pero por encima de todas esas cosas he conocido grandes personas. Muchas personas que una a una me han ido aportando su granito de arena.

Ayer cuando pasaba mi última noche en Sevilla me puse a pensar en todas las personas que esta ciudad me ha hecho conocer y realmente son muchas. Algunas pasaron de largo pero otras están dispuestas a quedarse por aquí por mucho tiempo. Grandes amigos a los que tengo que agradecer que estos 4 años hayan sido tan buenos, realmente muy buenos.

También han tenido algo que ver aquellos que ya conocía de antes como Sandra, Eme o Cristina, incluso Sevilla me ha ayudado a conocerles mejor gente que antes solo eran conocidos se convirtieron en grandes amigos, como olvidar a Víctor y más gente de los scouts.

Pero creo que este es el momento de rendir homenaje a esa persona que hace 4 años no conocía de nada y ahora se ha convertido en un pilar en mi vida, mi gran amiga Mariki. Es curioso, pero cuando llegue a Sevilla fue la primera persona que conocí, la primera con la que hable en clase. Quien nos diría entonces todo lo que íbamos a vivir juntos. Pero claro no puedo hablar de Mariki sin mencionar a todos los que en el Politécnico o en su defecto en los Remedios he conocido, Salva, Borja, Josué, Anai, Sonia, Fernando, Agustín, Isaac, Sali y es curioso porque conoces a una persona en clase y esa persona te presenta a sus compañeros de piso, o tu compañero te presenta a sus amigos o incluso más curioso tu compañero es de fuera y te invita a ir a su ciudad y conocer todos sus amigos. Así poco a poco el circulo va creciendo y creciendo y de una pequeña decisión como irse a estudiar tan solo a 100Km acabas viviendo toda una vida rodeada de gente con gran corazón y que como ya he dicho, algunos por cosas buenas y a veces otros por malas, pero igualmente uno a uno te va dejando su granito de arena en el corazón.

Y entonces terminas unos estudios, cierras una etapa de tu vida. Pero te das cuenta que ahora tu ciudad es esa. Que ahora vives ahí y claro, no te quieres ir. Decides seguir estudiando y vuelve la rueda a empezar. Primer día de clase sin conocer a gente y un año después hay personas con las que sin duda me iría al fin del mundo. Conoces gente en la clase y a tus nuevos compañeros y estos te presentan amigos, a sus parejas, y el círculo no deja de crecer. Sí que es verdad que los tiempos cambian y hay quienes se alejan sin hacer ruido, pero no importa. Simplemente su camino fue por otro lado. Lo importante es que su granito ya se quedó guardado. Y seguro que de cada uno que he conocido puedo decir que algo he aprendido. Reyes, Janira, Mari, Enrique, Omar, Andrés, Machuca, Jorge, Álvaro y Aimara, con la que el año que viene me voy (no al fin del mundo, pero si a 1750km. Ya no son 100).




Mil nombres que no he puesto pero que sabed que os tengo en mente. Cierro los ojos y solo tengo que dejarme llevar. 4 Años dan para mucho. Por todo ello gracias de corazón.

domingo, 12 de julio de 2015

Billete solo de ida.

En la vida tenemos que experimentar, probar, hacer locuras, no tener miedo, salir y conocer mundo. Tenemos que viajar, relacionarnos, emprender nuevos caminos, ponernos grandes metas, cumplir sueños… en resumen: debemos hacer lo que el cuerpo nos pida.

Entonces seremos realmente felices.

Da igual si la vida nos da calabaza, o nos pone contra la pared. Siempre hay que saber buscar esas pequeñas cosas que nos sacan una sonrisa. Olvidaros de la rutina, la monotonía y las cosas cotidianas. No estamos hechos para vivir dos días iguales. Así que olvidaros también del miedo, las preocupaciones y del que dirán.


Si tenéis poca iniciativa para este tipo de ‘aventuras’ os propongo una locura. Compra un billete solo de ida, olvídate de planificar tu regreso. Volverás cuando quieras. Elige un destino bonito, búscate un trabajo (o si eres rico lo tienes más fácil), conoce gene allí… y a vivir la vida.

Podéis pensar que esto es desperdiciar un año, o que va ser de vuestras vidas después, y seguro que ya estáis pensando que no podéis hacer eso porque tenéis unos estudios, un trabajo, gente que no puedes dejar, etc… no son más que excusas. (Ojo, que no es necesario irse solo en). ¿Vuestro trabajo es realmente el mejor del mundo? ¿Queréis estar en ese trabajo hasta los 60 años? ¿Realmente te aporta en tu vida algo más que la paga? ¿Entonces?... y a los de los estudios ¡Por favor! No hay nada más importante que el idioma, saber solucionar problemas, la madurez y las experiencias. Eso os abrirá más puerta que vuestra carrera. (Y más como están las cosas). Y por si eso no es suficiente para vosotros os digo que seguramente cuando volváis vuestra carrera y universidad seguirán iguales. A lo mejor encontráis vuestra verdadera vocación en el extranjero, quizás conocéis el amor de vuestra vida y nunca volvéis. O incluso puede que terminéis vuestros estudios allí donde vayáis y acabéis teniendo vuestro propio negocio. Pero todo esto no son más que hipótesis, lo más probable es que volváis a vuestra tierra a seguir con lo que dejasteis atrás, pero créeme que todo estará exactamente igual que cuando lo dejaste y el que sera diferente eres tu. Estas experiencias te dejan huella. Te ayudan a superar tus metas, a ser más feliz.

Estoy seguro que conocéis alguien que hizo alguna locura parecida, o habéis visto algún video en las redes sociales o en la tele sobre algún aventurero intrépido y estoy seguro que habéis pensado: ‘que guay’, ‘me encantaría hacer eso’, ‘algún día quiero vivir eso’, etc. Piensa en lo que necesitas para lograrlo, puedes hacerlo, no esperes al futuro. ¡Coge tu mochila y lánzate a la aventura¡

A lo mejor estoy equivocado, a lo mejor estas cosas son eso… locuras. Quizás no aporten nada a nuestras vidas. Pero aun así yo estoy dispuesto a arriesgarme. Vivir durante un año (o quien sabe cuánto tiempo) en un país extranjero, conocer nuevas ciudades, cultura, personas, etc. El 28 de Agosto de 2015 cojo rumbo a Reino Unido donde espero que me deparen muchas aventuras y poder contarlas por aquí. Para seguir animándote a que hagas alguna de estas locuras y para contarte lo que la vida me va ofreciendo por tierras británicas.


Así que no dudes en seguir nuestra pagina de facebook y compartir el blog. Hasta pronto.

lunes, 6 de julio de 2015

Dibujando un aparcamiento.

Son muchas las tareas que un arquitecto debe realizar. Una de ellas es la de dibujar en 2D edificaciones que ya existen bien para después realizar en ellas alguna reforma u obra, o simplemente para documentarlas.

Este ultimo cuatrimestre hemos tenido que dibujar el Aparcamiento del supermercado que hay junto a la escuela, en la avenida de la raza.

FOTOS:











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